Si bien llevan mucho tiempo en el mercado, las fajas para embarazadas son cada vez más solicitadas, debido a los beneficios que aportan. Como muchos otros productos, no faltan detractores de estas prendas, lo que ha creado varios mitos. En Fajas Galess creemos en la importancia de dar información verificable, por lo que en esta publicación desvelaremos algunos de esos mitos para que no duden y disfruten las ventajas de las fajas en esta etapa importante para las mujeres.
Las fajas posparto no son iguales a las fajas para embarazadas
Es importante hacer una aclaración. Las fajas posparto son más conocidas y solicitadas, además se han vuelto una pieza habitual entre las mujeres que recién dieron a luz, pero no deben confundirse con las fajas para soporte maternal cuyo uso es igualmente recomendado. Las primeras son utilizadas como un método de recuperación, ya que ayudan a fortalecer los músculos, evitar la temida flacidez posparto y le devuelve (aunque no al 100%, lo que solo es posible con dieta y ejercicio) al abdomen su forma anterior.
Por otra parte, las fajas para embarazadas se usan (al igual que ciertas bandas y cinturones) para que las últimas semanas de gestación sean más llevaderas, considerando el gran peso en el vientre que se debe cargar constantemente, por ende, su diseño y confección son completamente distintos a las fajas posparto.
El funcionamiento de las fajas prenatales es sencillo. Se trata de una prenda con una banda que se posiciona bajo el vientre y que se ajusta y sujeta a las vértebras lumbares. De esta manera, se produce estabilidad y no hay presión alguna sobre el bebé. Son un útil recurso para mujeres que pasan muchas dificultades en esta etapa. Igual actúan como un corrector de postura, pero no deben confundirse con las prendas diseñadas para evitar malas posturas durante el trabajo o actividades cotidianas.
Con el pasar del tiempo, las fajas para embarazo han sufrido modificaciones, de modo que solucionan diversos problemas para las madres, principalmente en aquellas semanas en las que el peso adicional en la parte frontal llega a causar dolores cervicales, lumbares y malas posturas. Cabe agregar otros cambios que solucionan las fajas, como la forma en que caminan algunas mujeres embarazadas en la que abre demasiado las piernas.
Mitos acerca de las fajas para embarazadas
Para minimizar los dolores y la fatiga, a muchas mujeres les recomiendan las fajas para embarazadas, no obstante, algunas no se animan a adquirir un ejemplar, debido a los mitos en torno a su utilización. Es probable que algún mito haya surgido por una mala experiencia, por ejemplo, por utilizar una faja de talla inadecuada o de mala calidad. Por tal motivo, es importante que reciban asesoría profesional para determinar cuál es el modelo más adecuado para su caso.
Con respecto a los mitos que se han difundido, destacan:
Causan problemas a los bebés
El hecho de que sean cada vez más utilizadas las fajas prenatales y se hayan popularizado demuestra que no lastiman al bebé. Por el contrario, reduce los dolores de la pelvis que se originan por la presión ejercida por el bebé. Es posible que padezcan alguna condición por la que no se recomienda usar fajas. Consulten a su ginecólogo para saber si es su caso, aunque es muy raro que representen un problema.
Oprime el abdomen
Se entiende que haya cierta presión abdominal si se utilizan fajas modeladoras, no obstante, esto no ocurre con aquellas diseñadas para el embarazo. Los profesionales que las diseñan (como los expertos de Galess), saben que la presión constante no es buena para el bienestar de los bebés, por lo que crean modelos de diferentes tallas que sean amigables con el cuerpo y cuya función es ofrecer soporte a la espalda para evitar fatigas y dolencias. De esta manera, más que perjudicar, las fajas prenatales ayudan a cuidar el cuerpo durante el embarazo.
Moldean la figura y evitan las estrías
Es inevitable que, durante la gestación, haya cambios notables en el cuerpo. Las fajas prenatales no evitan esto y, de hecho, no se diseñan para moldear, sino para dar alivio y soporte. Un cambio notable son las estrías. Tampoco se evita su aparición con dichas fajas. Para este caso, conviene usar algunos aceites y cremas hidratantes.
Causan incontinencia
Un problema común después de dar a luz es que se presente incontinencia. Algunas personas relacionan esta afección con la utilización de las fajas, lo que es falso. La verdadera causa es la presión misma que ejercen los bebés en la zona pélvica. Su ginecólogo les dará instrucciones para evitar esta condición o solucionarla en caso de que aparezca.
Cualquier faja es útil
No es verdad. Como hemos visto, las fajas para embarazo difieren mucho de las fajas convencionales. Usar cualquier ejemplar sin supervisión médica puede traer problemas, por lo que es importante consultar al experto y, a la vez, ser asesorado por profesionales en la venta de fajas.
Son la única solución a los dolores prenatales
Sin duda, brindan mucho alivio a las mujeres embarazadas, pero, si desean una solución mucho más efectiva, se recomienda acompañar la utilización de las fajas con rutinas de ejercicio, descansar bien y alimentarse saludablemente.
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