Después de nueve meses de embarazo y dar a luz, el cuerpo comienza a sufrir los cambios de la subida de peso y los provocados por la lactancia, por lo que muchas mujeres prefieren no regresar a su ropa normal, puesto que la zona abdominal no se ve como ellas desean. Por suerte, en la actualidad es cada vez más fácil encontrar fajas post parto, que además se pueden usar para recuperar poco a poco su figura.
El tener el vientre inflamado después del parto es algo normal durante las semanas posteriores, puesto que el organismo tiene que volver a su situación habitual, ya que durante la gestación el útero aumenta de tamaño lentamente y la velocidad con la que este permite a su vez que todos los órganos intraabdominales, se vayan acomodando de acuerdo con cada mujer; pero posterior al parto se produce un efecto contrario de forma muy diferente, puesto que el tamaño del vientre reduce de manera drástica y los órganos no pueden acomodarse con tanta rapidez.
Y no sólo es eso, también los músculos de la pared abdominal, que tuvieron una función fundamental durante las 40 semanas del embarazo, al ser el sostén del abdomen y del útero, no tienen la fortaleza para poder regresar a su estado habitual, ni siquiera tienen la unión que los mantenía fijos antes del embarazo.
Es importante que entiendan todo esto, puesto que es la clave para entender lo que necesita su cuerpo una vez que han pasado por el proceso del parto, y tener en cuenta que no está tal y como antes de que se embarazaran. De igual manera, saber toda esta información les ayudará a elegir cual es la faja que requieren y con que hábitos necesitan combinarla para que puedan recuperar la imagen del abdomen que tenían antes de embarazarse.
Es fundamental que entiendan que las fajas post parto no son una herramienta milagrosa, sino que las ayudarán a recuperar su figura con el uso constante durante unos meses, pero deben combinarla con ciertos hábitos, el principal es llevar una dieta adecuada y equilibrada, que incluya todo el aporte de nutrientes para que, si le están dando el pecho a su bebé, ambos reciban los nutrientes adecuados.
De igual manera, el ejercicio físico también es fundamental, aunque sólo sean ejercicios ligeros, como el salir a caminar por el parque con el carrito de su bebé. Lo más recomendable es hacer de 30 minutos a una hora de ejercicio diario, para que su cuerpo pueda recuperarse del parto, reduzca el aumento de peso que tuvieron y mantenerse saludables.
¿Cuándo usar la faja después del parto?
El uso de fajas después del parto es uno de los métodos más utilizados por las mujeres para recuperar su figura y disminuir considerablemente los efectos que tiene en el cuerpo, principalmente la zona abdominal, después del embarazo y en el parto, pero antes de usarlas tienen que tener en consideración algunas cosas. Por ejemplo, que no deben usar las fajas inmediatamente después del parto, sino que tienen que esperar un tiempo.
Estas prendas no están diseñadas para ser usadas de manera inmediata, además el cuerpo requiere un periodo de recuperación. Cuando se trata de un parto natural, puede ser empleada unos días antes de que se cumpla la cuarentena, es decir poco más de un mes después del parto, puesto que es el periodo para que el cuerpo de manera fisiológica, es decir, los músculos y los órganos del abdomen, regresen a una posición similar a la de antes de la gestación, que es más anatómica.
De igual manera, al ser un parto natural, el útero se contrae mucho más fácilmente, puesto que no ha sufrido ninguna intervención quirúrgica de la cavidad o de la pared, contrario a las mujeres que tienen un parto por cesárea, las cuales deben esperar al menos un par de meses antes de poder utilizar una faja, puesto que el cuerpo debe de cicatrizar por completo y desinflamarse.
Una vez que ha pasado el periodo recomendado para que el cuerpo se recupere, podrán usar fajas post parto, las cuales deben ser elegidas de la talla adecuada, es decir, su talla actual, de manera que les resulten cómodas para llevar, no sólo desde el punto de vista estético, sino también les ayudarán a reforzar la zona abdominal y la región lumbar de la espalda, las cuales fueron sometidas a mucho trabajo durante el embarazo y serán más exigidas durante la lactancia y la primera infancia.
En caso de que hayan tenido un parto natural, les recomendamos que empleen fajas diseñadas para ese caso, las más aconsejables son las fajas tubulares que no oprimen la entrepierna. Son las mejores porque si les han dado puntos por un desgarro o una episiotomía, no se recomienda que usen una prenda que aumente la temperatura en la zona y las haga sudar de más, afectando el proceso de recuperación del cuerpo.
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