Las fajas más que una prenda que nunca pasa de moda, también son una gran herramienta que los ayudará a moldear el cuerpo, en especial la cintura y la cadera; las fajas reductivas se han convertido en grandes aliadas del día a día, por lo que se han vuelto muy común ver que tanto mujeres como hombres las utilicen como parte de sus prendas de vestir diarias.
Lo anterior se debe a que tienen muchos beneficios para el cuerpo, el que más destaca es para las mujeres que las hace sentir mejor y les ayuda a conseguir una figura mucho más moldeada y estilizada, como con la que siempre han soñado. Gracias a esto podrán volver a utilizar las prendas que tanto les gustan como los vestidos ajustados, puesto que hay fajas capaces de reducir hasta dos tallas de cintura, y a la vez conseguir un efecto de vientre plano. Sólo tienen que buscar la faja adecuada que vaya con las demás prendas de vestir.
De igual manera, el uso de fajas ayuda a bajar las inflamaciones después de un parto o una intervención quirúrgica, es por ello por lo que muchos de los cirujanos recomiendan el uso de fajas después de ciertas operaciones. Otro beneficio es que ayudan en la perdida de peso y a recuperar la silueta que tenían antes, si las utilizan mientras siguen una rutina de ejercicio y la combinan con una dieta saludable.
Para alcanzar estos beneficios de las fajas reductivas únicamente deberán tener una cosa en cuenta: elegir la talla adecuada. La mayoría de las personas al momento de comprar una faja no seleccionan la talla que les corresponde, sino que en la mayoría de los casos se inclinan por una talla menos, de esta forma se piensa que la faja se les ajustara mejor y podrán reducir más rápidamente el volumen del vientre y las caderas. Sin embargo, no es así, ya que las fajas están diseñadas para que se ajusten, reduzcan y moldeen la figura con el uso de la talla real que utilizan en su ropa, no con una menor, lo cual puede ser contraproducente.
Si eligen una faja de una talla menor a la que deben lo más probable es que desde un inicio no entren en la faja y tengan que comprar una nueva. En caso de que puedan ponérsela podrá ocasionarles un corte de digestión al momento en que coman o beban, lo que provoca una sensación poco agradable que las molestará por todo el día. Así como se podrá enrollar, tanto en la zona debajo del pecho, como en la espalda baja, por lo que no cumplirá con su función y será incluso muy molesta para que la lleven puesta por mucho tiempo y terminarán por desistir de utilizarla.
Otro factor que tienen que tener en cuenta es cuánto tiempo tienen que utilizarla, puesto que no pueden llevarlas puestas por todo el día, ya que también puede ser contraproducente. Lo primero que deben considerar en estos casos es el porque van a utilizar la faja, en los casos en que el uso sea postoperatorio, el tiempo que la llevarán puesta al día será determinado por su médico, el que les indicará el tipo de faja que necesitan, el nivel de compresión, las horas por días y el número de días que tienen que usarlas para completar su recuperación. Deben seguir las indicaciones al pie de la letra, puesto que es parte de su recuperación.
Pero si el motivo de usar fajas reductivas es para moldear su figura y contornearla, se deben seguir otros criterios. En primer lugar, deben elegir el modelo y diseño adecuado, con el que se sientan cómodos y que puedan combinar con el resto de su ropa. De igual manera, como mencionamos, es fundamental que elijan la talla adecuada, para que no sientan molestias y limitaciones.
Cuando es la primera vez que usan una faja, lo más recomendable es que no la lleven puesta por más de una o dos horas, en lo que su cuerpo se acostumbra, posteriormente podrán utilizarlas por periodos que no superen las cuatro horas y después de eso les recomendamos descansar. En caso de requerir usarlas más, el tiempo máximo de uso es de seis horas al día, pero no se recomienda que se utilicen por más tiempo, ya que el uso por ocho o doce horas también puede provocarles algún daño físico, ya sea temporal o permanente.
Una vez que ya usen la faja diariamente en su tiempo máximo recomendado y se sientan cómodos al usarlas, el periodo en que se recomienda que las usen diariamente es por dos meses antes de subir de nivel de compresión, para repetir todo el proceso hasta llegar al máximo de compresión que permite la faja.
Sin duda, hay muchos beneficios de llevar una faja todos los días, la principal es la reducción de tallas, una mejor postura al trabajar y que las hará ver más radiantes y estilizadas. Así que tienen muchos motivos para usarlas diariamente, solo tengan cuidado de elegir la mejor y no usarla demasiado. Recuerden en todo momento que las fajas reductivas deben ser cómodas y se tienen que sentir a gusto en ellas. No se esfuercen de más y siempre adquieran prendas de la más alta calidad, manufacturadas con materiales de primera y que estén completamente garantizadas.
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