¿Sabías que el estrés es el culpable de muchas enfermedades hoy en día? Esto se complica aún más cuando tenemos mamis que son primerizas. En Galess nos preocupamos por ellos así que te brindamos una serie de pasos para poder sobrellevarlo. #GalessMeMotiva
Por más que leamos todo lo que existe al respecto mientras estamos embarazadas de nuestro primer hijo, sigamos los consejos de todo el mundo y tratemos de hacer lo que todos hacen, ni bien nace el niño todas dudamos si lo estamos haciendo bien y terminamos por sufrir un estrés que a veces no podemos controlar. Para ayudarte a pasar este trance, te queremos enseñar algunos tips para que tengas en cuenta y puedas lidiar con el estrés de ser una madre primeriza. ¡Mira!
En el caso de que sientas que no das más y que el estrés de ser madre primeriza hace mella en tu vida, existe una serie de pasos a seguir que son los aconsejados por los especialistas.
- Haz una cita con el doctor
Puede ser con tu médico de cabecera, con la partera, con el obstetra o con un terapeuta. También puedes buscar un psiquiatra experto en salud reproductiva, un médico que se especialice en el estado de ánimo o en las condiciones psiquiátricas relacionadas con los ciclos reproductivos.
- Di en forma clara qué tan mal te sientes
Puedes contar cuán mal te sientes por tener que estar despierta toda la noche y pedir ayuda. Consulta con varios profesionales hasta encontrar el que más confianza te dé, pues este tipo de problemas es mucho más serio de lo que crees.
- No abandones el tratamiento
Si tu médico te sugiere que realices psicoterapia, que cambies la dieta o tomes medicamentos para aliviar el estrés, hazle caso y no interrumpas el tratamiento pensando que no dará resultado. Recuerda que esas cosas no son automáticas.
- Ten presente que no estás sola
Encontrar amigos que te entiendan es algo importantísimo. Busca en tu cuidad grupos de autoayuda para mujeres con problemas de posparto. Verás que escuchar que no eres la única te hará sentir mucho mejor.
Lidiar con el estrés de ser madre primeriza no es fácil y a algunas mujeres les afecta más que a otras. Presta atención a cómo te sientes y, si no te gusta, ¡busca ayuda!